Cállate ya
y déjate llevar.
Mira hacia adelante,
toma decisiones sin pensar.
Ahora es el momento,
no habrá situaciones adecuadas.
Pensar demasiado ha hecho
que no experimentes nada.
Te has refugiado en tu mente
reviviendo tu pasado.
Ese que ya se ha ido,
ese que ya ha quedado en el olvido.
Te empecinaste con soñar
con futuros irreales,
buscando metas
totalmente inalcanzables.
Ahora que lo sabes,
mira hacia tus pies.
El presente es lo que tienes,
así que vívelo bien.