Hoy quiero preguntarte si aún te acuerdas de mí. Si aún sigo ocupando tus sueños como antaño lo hacía cada día, a diario. Hoy me pregunto si recuerdas la primera vez que nos vimos. Aquella en la que nerviosos, por fin, nos conocimos. Dos viajes largos, una experiencia única y algo que nunca olvidaré y con cariño recordaré: a ti.
Pero, no sé si recuerdas los tan aparentes simples “buenos días” y “buenas noches” que nos decíamos. Ese beso que cada noche me hacía sumirme en un sueño profundo y tranquilo.
La preocupación por perderte no estaba en mi mente, pues segura estaba de tenerte conmigo por siempre. Y, ahora, fíjate. Soy yo quien me pregunto si te acuerdas de mí. Porque yo sí lo hago. Cada día, a diario. Como siempre, como antaño. No me he olvidado de nada, en mí nada ha cambiado. Y la esperanza guardo mientras me aferro a aquellos sueños que ambos teníamos y compartíamos antaño. ¿Te acuerdas de ellos?
Pero ha pasado el tiempo, y tu olor se esfuma por momentos. Pero yo, no quiero olvidarme de ti, al contrario que tú que no sé si te acordarás ya de mí.
Cuando eso sucede me sumerjo en ese libro que aún conserva tu olor, mientras leo esa carta que una vez me dedicaste, llena de amor.
Creo que aferrarse a las cartas y los sueños nos permitirá mantener despierto nuestro corazón al compás de cada recuerdo, que bello! Es triste tener que anestesiar nuestra alma, nuestro corazón para poder “olvidar” aparentemente a quien se ha amado tanto…un abrazo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
“son aquellos recuerdos que no perderan en el alma,la triteza y el amor”.Son buenos que regalan cosas que llevan experiencias por ej: Un viaje deseado …para el amor que realmente que la persona amó de verdad y y se conocen de muchos años.Re lindo que relatas….
un abrazo bello ,desde el blog vida autentica.
Me gustaMe gusta
todos los dias
Me gustaLe gusta a 1 persona